Saône y Loira revela un patrimonio que no es solo un decorado. Las alturas de Morvan aún conservan las huellas de Bibracte, un antiguo oppidum donde se escribió la historia gala. Autun evoca el poder romano con uno de los teatros antiguos más grandes del país. Más al sur, pueblos fortificados, abadías románicas y castillos añaden una capa medieval y renaissantista a este mosaico. Le Creusot narra la entrada en la era industrial. Entre piedras antiguas, paisajes boscosos y patrimonios religiosos, la región reúne sitios que muestran la profundidad de su pasado.
Fortificación celta situada en el monte Beuvray, que abarca doscientas hectáreas. Las excavaciones revelan los vestigios de un oppidum importante y el museo cercano ilustra la vida cotidiana de los pueblos galaicos en Morvan.
Anfiteatro del siglo I que puede albergar hasta diecisiete mil espectadores. Las paredes de piedra todavía visibles recuerdan la importancia cultural de la ciudad antigua de Augustodunum.
Pueblo medieval conservado donde conviven una iglesia románica, una fortaleza del siglo IX y casas de piedra ocre. Las calles estrechas ofrecen una vista del Brionnais histórico.
Escultura gótica del siglo XIV atribuida a Claus Sluter. El monumento representa a seis profetas en torno a un pozo simbólico y refleja la artesanía burgalesa de finales de la Edad Media.
Acueducto de piedra construido en el siglo XIX para permitir que el Canal del Centro cruce el río Arconce. La estructura demuestra la ingeniería fluvial de la época.
Edificio románico del siglo XII inspirado en la arquitectura de Cluny III. La basílica se distingue por sus tres naves, su transepto alargado y sus volúmenes luminosos.
Complejo monástico del siglo XI con arquitectura románica. La cripta, las columnas gruesas y las pinturas murales muestran características tempranas de las técnicas constructivas románicas en Borgoña.
Residencia barroca del siglo diecisiete con jardines franceses geométricos, terrazas diseñadas y un extenso parque de ciento veinte hectáreas con árboles centenarios.
Una fortaleza del siglo XIV ubicada en una isla en medio de un lago. La arquitectura combina influencias góticas y renacentistas y forma un conjunto pintoresco.
Lugar emblemático de la revolución industrial francesa. Los antiguos talleres, forjas y edificios del siglo XVIII muestran el auge de las industrias metalúrgicas en Borgoña.
El edificio fue construido como fortaleza en el siglo XIII y renovado durante el Renacimiento, conservando elementos defensivos y un foso.
Construido en 1605, el castillo contiene salas doradas con techos pintados y jardines geométricos de estilo francés.
Lavadero del siglo XIX ubicado en Montceau les Mines. Sus pilas de piedra y su espacio cubierto servían a las lavanderas del cinturón minero y representan la vida cotidiana vinculada al trabajo industrial.