Praga es conocida por sus monumentos históricos, pero más allá de las rutas turísticas habituales se encuentran numerosos lugares menos visitados que ofrecen una visión más profunda de la historia y la vida contemporánea de la ciudad. Esta colección conduce a barrios, jardines y edificios a menudo ignorados, revelando el pasado estratificado de Praga y su escena cultural activa. Entre los lugares se encuentran la fortaleza de Vyšehrad con su cementerio histórico, el jardín barroco Vrtba en Malá Strana y el monasterio de Strahov con su impresionante biblioteca. El parque Kampa en la isla del mismo nombre ofrece paseos tranquilos a lo largo del canal Čertovka, mientras que el Speculum Alchemiae presenta laboratorios subterráneos de la época renacentista. El palacio de Troja en la parte norte de la ciudad muestra arquitectura barroca y jardines en terrazas, y el convento de Santa Inés alberga colecciones de arte medieval. Otras paradas incluyen el jardín Wallenstein con sus arcadas renacentistas, el jardín cervecero de Letná con vistas sobre los tejados y el antiguo recinto fabril de MeetFactory en Smíchov, ahora centro cultural. La Biblioteca Técnica Nacional en Dejvice y la escultura giratoria de Kafka en Národní třída representan la Praga contemporánea. Desde el complejo fortificado de Invalidovna en Karlín hasta la Reserva Real de Caza en Bubeneč, esta colección proporciona perspectivas variadas sobre la capital checa.
Esta fortaleza del siglo X se encuentra en una colina sobre el río Moldava y alberga una basílica, un cementerio y murallas defensivas. Ofrece a los visitantes la oportunidad de explorar una zona más tranquila de Praga, lejos de las rutas turísticas más concurridas del centro de la ciudad. El complejo refleja la historia bohemia temprana y alberga el lugar de descanso final de figuras checas destacadas en artes y cultura. Desde las murallas se puede contemplar la ciudad y el río.
Este jardín barroco se extiende por múltiples terrazas con esculturas de piedra, columnas y jarrones que ascienden por la ladera. Los niveles geométricamente dispuestos ofrecen diferentes perspectivas de los tejados y torres de Praga. La arquitectura data de principios del siglo XVIII y muestra los elementos característicos del diseño de jardines barrocos con parterres formales y figuras mitológicas.
Este monasterio del siglo XII se encuentra en una colina al oeste del centro de Praga y alberga dos salas de biblioteca barrocas que contienen aproximadamente 200.000 volúmenes. La Sala Teológica data de la década de 1670, mientras que la Sala Filosófica se completó en la década de 1790 y presenta frescos en el techo que representan el conocimiento humano. Los visitantes contemplan las bibliotecas a través de puertas de cristal para preservar las colecciones históricas, y el recinto del monasterio ofrece vistas de la ciudad hasta el Castillo de Praga.
Este muro histórico se convirtió en símbolo de libertad después de 1980, mostrando mensajes de paz y grafitis inspirados en las letras de John Lennon y sus ideales pacifistas. El mural cambia constantemente cuando los visitantes añaden nuevos mensajes, formando un contraste marcado con el pasado comunista de la ciudad, cuando tales expresiones estaban prohibidas.
Este parque entre el Moldava y el canal Čertovka presenta esculturas modernas al aire libre y senderos sombreados que ofrecen una alternativa tranquila a las rutas turísticas concurridas del centro histórico de Praga. El espacio verde combina áreas naturales de descanso con arte contemporáneo, creando un lugar donde detenerse lejos de las multitudes del Puente de Carlos.
Este laboratorio subterráneo del siglo XVI conserva el equipo original donde los alquimistas realizaban experimentos bajo la protección del emperador Rodolfo II. Las cámaras subterráneas fueron descubiertas por casualidad en 2002 y ofrecen una visión auténtica de las condiciones laborales de los eruditos de la corte que analizaban sustancias químicas y buscaban la piedra filosofal. El Speculum Alchemiae exhibe aparatos de destilación, hornos y herramientas conservados en su entorno original cerca del casco antiguo.
Este cementerio histórico establecido en 1869 reúne las tumbas de destacados compositores, escritores, artistas y figuras públicas checas en un recinto que funciona como panteón nacional de la cultura checa. Los sepulcros varían desde marcadores simples hasta monumentos elaborados, incluyendo las tumbas de Antonín Dvořák, Bedřich Smetana y Alfons Mucha. El cementerio se extiende por varias hectáreas en el extremo sur de la fortaleza de Vyšehrad y ofrece a los visitantes una visión de la historia cultural checa.
Este palacio barroco del siglo XVII se alza en el extremo norte de la ciudad y presenta frescos de techo a gran escala que representan victorias habsburgas y escenas mitológicas. Los jardines de diseño simétrico, con sus escalinatas en terrazas, esculturas y viñedos restaurados, se extienden a lo largo de varias hectáreas y ofrecen un contraste con la densidad urbana del centro. El palacio alberga hoy parte de la Galería Nacional, centrada en la pintura del siglo XIX, y continúa siendo un ejemplo funcional de arquitectura de jardines barrocos fuera de las rutas turísticas habituales.
Este jardín barroco del siglo XVII en el complejo del Palacio Wallenstein exhibe esculturas de bronce, fuentes y un estanque de carpas. El jardín ocupa aproximadamente 1,7 hectáreas y ofrece un refugio tranquilo lejos de las principales rutas turísticas concurridas, con arcadas, pavos reales y una sala terrena de estilo italiano.
Este jardín cervecero al aire libre en el parque de Letná acoge a 800 comensales y se sitúa sobre el río Moldava con vistas abiertas hacia el casco antiguo. El establecimiento sirve cerveza checa de barril y platos de la cocina bohemia, incluyendo carnes a la parrilla y guarniciones tradicionales. Funciona desde primavera hasta otoño, atrayendo tanto a residentes como a viajeros que buscan un respiro de las calles abarrotadas del centro histórico. Las mesas se disponen bajo los árboles y en zonas abiertas, proporcionando sombra durante el clima cálido. El acceso se realiza por senderos a través del parque, que ocupa una meseta sobre la ribera del río.
Este antiguo monasterio del siglo XIII alberga actualmente una importante colección de arte religioso medieval de la Galería Nacional. El Convento de Santa Inés fue fundado en 1231 y representa uno de los primeros edificios góticos de Bohemia. La exposición incluye pinturas y esculturas bohemias y centroeuropeas de los siglos XIII al XVI, con obras de la Escuela Bohemia y retablos góticos tardíos. Los edificios monásticos restaurados, con sus claustros y capillas, ofrecen una visión de la vida monástica medieval y la arquitectura gótica.
Este monasterio benedictino del siglo XIV en la Ciudad Nueva de Praga fue fundado bajo el emperador Carlos IV y conserva importantes pinturas murales del periodo carolingio. La estructura gótica de la iglesia fue reconstruida tras los bombardeos de 1945, mientras que los frescos medievales originales del claustro permanecen intactos. El Monasterio de Emaús sirvió durante siglos como importante centro religioso y cultural y hoy alberga una comunidad benedictina activa y un refugio para las tradiciones litúrgicas eslavas.
Este antiguo complejo militar del siglo XIX fue reconvertido en un centro cultural que alberga galerías de arte, una cafetería, un cine y espacios dedicados a programas culturales. Ubicado en el barrio de Karlín, el conjunto ofrece una visión del pasado industrial de Praga mientras sirve como punto de encuentro para el arte contemporáneo y eventos culturales en un entorno que conserva su arquitectura histórica.
Este museo ocupa un antiguo molino a orillas del Moldava y presenta una colección de arte checo y europeo del siglo veinte. El Musée Kampa se encuentra entre las instituciones culturales de Praga menos visitadas y ofrece una perspectiva sobre la historia del arte moderno de la región. Los espacios de exposición incluyen obras de František Kupka y otros artistas significativos que marcaron la producción artística de Europa Central.
Esta elevación de 318 metros ofrece un refugio tranquilo lejos del abarrotado centro de Praga. Las laderas albergan un amplio parque con jardines de rosas y huertos frutales, además de una torre de observación de 60 metros que ofrece vistas completas de la ciudad. Senderos recorren todo el terreno, conectando diferentes secciones de jardines con estructuras históricas que datan de finales del siglo XIX.
Esta iglesia gótica del siglo XIV domina la Ciudad Vieja de Praga con sus dos torres de 80 metros que se elevan sobre la Plaza de la Ciudad Vieja. El interior alberga la lápida del astrónomo Tycho Brahe y un altar mayor barroco. Construida originalmente para servir a la comunidad de comerciantes alemanes, la iglesia se convirtió posteriormente en el centro principal del movimiento husita.
Este cementerio de 50 hectáreas se extiende por varias manzanas y alberga sepulturas desde el siglo XVIII hasta la actualidad, incluido el lugar de descanso final de Franz Kafka. El extenso terreno muestra diversos estilos arquitectónicos en sus monumentos funerarios y mausoleos, desde capillas neogóticas hasta lápidas modernistas. Los visitantes encontrarán tumbas de figuras checas destacadas de las artes, la política y las ciencias, además de varias secciones militares de diferentes períodos.
Esta iglesia modernista de principios del siglo XX se encuentra en el barrio residencial de Vršovice y presenta formas geométricas con un campanario triangular y ventanas de vidrio de colores. El arquitecto Josef Gočár diseñó el edificio en un estilo cubista-expresionista poco frecuente en Praga. Los espacios interiores combinan líneas limpias con funciones litúrgicas y ofrecen un ejemplo de renovación arquitectónica tras la Primera Guerra Mundial.
Este centro de arte en una antigua fábrica presenta exposiciones de arte contemporáneo internacional y organiza regularmente conciertos, representaciones teatrales y talleres de artistas. MeetFactory se fundó como proyecto cultural alternativo y ofrece espacio para trabajos experimentales de pintura, escultura, performance y música. Las instalaciones incluyen varias salas de galería, un teatro, un club de música y estudios de artistas donde trabajan creativos de distintos países. Ubicado en el distrito de Smíchov, el centro se ha consolidado como un lugar importante para la escena artística contemporánea de la ciudad y continúa atrayendo a artistas y público tanto local como internacional.
Esta calle empedrada bordeada de casas del siglo XVI se encuentra en uno de los rincones más tranquilos del barrio del castillo. Las fachadas bajas y las ventanas pequeñas reflejan la época en que artesanos y sirvientes del castillo vivían aquí. Galerías y talleres ocupan ahora la estrecha calle, que permanece alejada de las multitudes de las rutas turísticas principales.
Este estrecho canal entre la isla de Kampa y el barrio de Malá Strana alimentaba molinos de agua durante la Edad Media y ahora ofrece un contraste tranquilo con las rutas turísticas concurridas del centro histórico de Praga.
Esta iglesia barroca del siglo dieciocho se encuentra en el corazón de la Ciudad Vieja y representa el patrimonio religioso de Praga más allá de las rutas turísticas habituales. Las pinturas del techo y las esculturas del interior documentan la tradición artística del período barroco, mientras que el altar mayor con sus elementos decorativos subraya la importancia litúrgica del edificio. La iglesia ofrece a los visitantes la oportunidad de explorar la arquitectura sacra de la ciudad en un entorno más tranquilo.
Este edificio histórico en Výtoň documenta siglos de transporte de madera por el río Moldava. La exposición muestra herramientas y equipamiento utilizados por los almadiers que transportaban troncos desde los bosques de Bohemia hasta la capital. La casa de aduanas recuerda la importancia económica del comercio fluvial para Praga y ofrece una visión del trabajo de los navegantes fluviales. La colección incluye instrumentos náuticos, fotografías históricas y maquetas de las balsas empleadas para el transporte.
Este edificio gótico del siglo XIV se encuentra en el lado oriental de la Plaza de la Ciudad Vieja y presenta exposiciones rotativas de arte contemporáneo en sus salas históricas. La Casa de la Campana de Piedra se abrió al público después de trabajos de restauración extensos en los años 1980 que descubrieron su fachada medieval de piedra. Los pisos superiores albergan espacios de galería, mientras que la planta baja acoge ocasionalmente eventos culturales.
Este parque se extiende por la ladera debajo del Castillo de Praga y ofrece praderas, grupos de árboles y senderos apartados de los principales flujos turísticos. Creado a principios del siglo XIX como uno de los primeros jardines públicos de Praga, el sitio conserva su diseño original de terrazas con árboles maduros que proporcionan un refugio tranquilo a pocos pasos del distrito del castillo.
Este pabellón se construyó a partir de 1538 como residencia de verano para la reina Ana y combina elementos renacentistas italianos con artesanía bohemia. La estructura de dos plantas presenta una galería de arcadas abiertas en la planta baja con 36 columnas, cuyos capiteles están decorados con escenas mitológicas. Ubicado en los jardines del Castillo de Praga, el edificio servía para recepciones reales y retiros privados. El preciso trabajo en piedra de las fachadas documenta las habilidades técnicas de los artesanos de aquella época. La estructura sobrevivió a varios incendios y fue restaurada en el siglo XVIII, conservándose en gran medida la estructura original.
Este pabellón de exposiciones se inauguró en 1891 como estructura monumental de hierro para la Exposición del Jubileo y se convirtió en el principal recinto ferial de la ciudad. La nave de 238 metros de largo y 54 de ancho acoge ferias comerciales, exposiciones de arte y eventos culturales que conectan el patrimonio industrial de Praga con usos contemporáneos.
Este complejo barroco en Karlín fue construido en el siglo XVIII como hospital militar y residencia para soldados heridos. Inspirado en el Hôtel des Invalides de París, el edificio presenta un amplio patio interior rodeado de alas simétricas. Las instalaciones albergan actualmente el Instituto de Historia Militar y abren sus salas históricas al público durante eventos y exposiciones ocasionales.
Esta reserva de caza histórica se extiende sobre 95 hectáreas (unas 235 acres) con robles centenarios, senderos y una población establecida de ciervos rojos. Antiguamente reservado para cazadores reales, el recinto ofrece ahora un refugio tranquilo lejos de las atracciones concurridas de Praga, conservando el paisaje natural y el patrimonio arquitectónico de la época de los Habsburgo.
El castillo de Chvalský, un complejo restaurado del siglo XIV, alberga exposiciones de arte y conciertos. Situado en Horní Počernice, en las afueras del noreste, la finca ofrece visitas guiadas por sus salas históricas, brindando una visión de la arquitectura medieval bohemia. Los terrenos muestran diversos estilos arquitectónicos acumulados a lo largo de los siglos, y el recinto funciona ahora como centro cultural lejos de los circuitos turísticos habituales del centro de la ciudad.
Este jardín barroco del siglo XVIII se encuentra en Smíchov y rodea una villa histórica. El recinto conserva ornamentos de piedra originales e incluye una pequeña fuente. El jardín proporciona un refugio tranquilo del centro de la ciudad y muestra elementos del diseño paisajístico barroco típicos de la Praga histórica. La villa y sus espacios exteriores documentan el estilo de vida de las familias acomodadas de Praga durante el período barroco y ofrecen a los visitantes una visión de la cultura de jardines urbanos de esa época.
Estos amplios jardines ascienden por una colina empinada entre Smíchov y Petřín, ofreciendo una red tranquila de senderos sinuosos a través de praderas en terrazas y secciones arboladas. El terreno del siglo XIX incluye varias esculturas y una iglesia de madera, junto con el Museo Etnográfico, que documenta el arte popular checo y las tradiciones rurales. Las terrazas superiores proporcionan vistas sobre los tejados de la ciudad hacia el río Moldava.
Esta biblioteca técnica inaugurada en 2009 se extiende por nueve plantas con zonas de estudio, sistemas de préstamo automatizados y una arquitectura contemporánea que se aleja de los espacios bibliotecarios tradicionales de Praga. La institución combina recursos técnicos con diseño moderno, proporcionando acceso a extensas colecciones para estudiantes e investigadores centrados en ingeniería y campos relacionados.
La Torre de Televisión de Žižkov se eleva 216 metros sobre la ciudad y ofrece amplias vistas de Praga desde su plataforma de observación. Completada en 1992, la estructura funciona como torre de radiodifusión y presenta en su exterior las notables esculturas de bebés gateando del artista David Černý, añadidas en el año 2000. Estas figuras distintivas agregan una dimensión artística a la estructura funcional, convirtiendo la torre en uno de los hitos más inusuales de la ciudad, que combina infraestructura moderna con arte contemporáneo.
Esta estatua mecánica del escritor Franz Kafka consta de 42 capas metálicas móviles que giran independientemente, reconfigurando continuamente el rostro. El escultor checo David Černý creó esta obra en 2014 como parte de su serie de instalaciones provocativas en Praga. Con más de 10 metros de altura frente a un centro comercial, la cabeza se ha convertido en una de las obras de arte más inusuales de la ciudad, atrayendo a visitantes que buscan piezas contemporáneas más allá de los monumentos tradicionales.
El Karolinum es un edificio universitario gótico del siglo XIV con decoraciones de piedra tallada y bóvedas interiores con pinturas al fresco. Ha funcionado como centro académico desde su fundación y ha experimentado múltiples renovaciones a lo largo de los siglos, conservando sus elementos medievales. El complejo arquitectónico combina diferentes estilos constructivos y refleja la larga historia de la Universidad Carolina, una de las más antiguas de Europa. Los visitantes pueden recorrer las salas históricas y examinar los detalles góticos preservados junto con las adiciones arquitectónicas posteriores.